Y nos quejamos...

Yo siempre digo que “quejarse es gratis”, ahora mismo me arrepiento.

Quizás a todos nos cuesta ver qué hay más allá de nuestro horizonte. Vemos a nuestros amigos, al vecino, a tu amigo de Málaga, y posiblemente algún que otro Erasmus, pero aquí no termina todo.

¿Qué pasa en esos lugares dónde no hay apenas recursos? ¿Qué pasa con esas familias y con aquellas personas que no tiene nada para comer, o quizás solo lo justo y necesario para sobrevivir?

Muchas de estas personas no tienen suficientes recursos ni económicos ni sociales para poder ir más tranquilas por la vida. Muchas de estas personas no pueden permitirse casas con materiales resistentes o con un mínimo de seguridad en la infraestructura (cosa que en España -por ejemplo- sí que nos podemos permitir).

(Captura del vídeo que aparece debajo.)
¿Y qué pasa cuando en estos lugares ocurre una catástrofe natural? Si no tenían nada, ¿qué pueden tener ahora? Quizás mucho menos de lo que jamás podamos llegarnos a imaginar. Esos países donde la pobreza y la limitación de recursos están a la orden del día, dónde no tienen una seguridad social o algún tipo de sustento social que les puedan aportar lo mínimo. A estas personas, ¿quiénes les ayudan?

Quizás deberíamos pararnos a pensar. Quizás deberíamos mirar más allá de nuestro horizonte y pensar que existe un mundo, ese mismo mundo en el que vivimos, donde hay gente cuya principal preocupación NO es que se le haya roto el móvil, se haya quedado sin batería/internet, o que cierta persona le haya mirado “mal”, o incluso que no le hayan dado un "Me gusta”. Piensa que en ese mundo en el que vives hay personas que se tienen que preocupar por poder conseguir algo de comida para su familia (que son mucho más numerosas que las españolas), o encontrar un techo donde dormir o protegerse de las malas condiciones del lugar.

Quizás deberíamos pensar en quitarnos algún capricho para ayudar y aportar nuestro granito de arena a esta gente que realmente lo necesita.



--
Os dejo un vídeo el cual me ha ayudado a ver un poco más allá de mi horizonte (a partir de minuto 9:14).



Hay que agredecer a personas como María Cadepe (autora del vídeo anterior) que hagan más visible la situación que sufren muchos.

   Una cosa que me asombra de esta gente es su gran virtud de compartir todo aquello que tienen aunque tengan muy poco, lo comparten (sinceramente los admiro). Ojalá en nuestra sociedad llegaramos a ese punto 
de empatía y humanidad.   

Comentarios

Entradas populares de este blog

Todo empieza a encajar

Como el Yin y el Yang

Y te vi... - Relato